REMIX DE ÉXITOS

Beyoncé arrasa en la Super Bowl junto a las Destiny's Child

Beyoncé ha estado a la altura de las expectativas con una de las actuaciones más memorables en la historia de los half times de la Super Bowl. El plato fuerte ha sido cuando han subido al escenario Kelly Rowland y Michelle Williams que sorprendieron interpretando juntas el Single Ladies.

Una de las actuaciones más esperadas de cada año es la del intermedio de la Super Bowl, que este año protagonizaba Beyoncé. Ante la polémica por su playback ante la investidura de Obama, la ínterprete de Run the world ha demostrado que es una de las cantantes con mejor voz en directo.

Con un escenario en el que aparecían dos caras de perfil con una silueta gigante en llamas de la propia cantante, Beyoncé inicia su show con Love in top y con el ya clásico Crazy in love. Le siguieron End of time y Baby boy hasta que llegó la sorpresa de la noche: Kelly Rowland y Michelle Williams saltaron literalmente del suelo del escenario para unirse a Beyoncé.

Las Destiny's Child al completo interpretaron un mix de Bootylicious e Independent Women Part 1 pero lo que realmente fue el plato fuerte de la noche es ver a la girlband al completo cantando y bailando el Single Ladies de Beyoncé.

Para terminar, la mujer de Jay-Z optó por Halo, una de sus baladas más conocidas con la que se acercó al borde del escenario para cantarle a sus fans, seleccionados por Pepsi, con la que la cantante tiene un contrato multimillonario, para estar en las primeras filas.

Pero no todo ha sido la actuación de Beyoncé, aunque la del descanso suele eclipsar el resto, también hay que destacar la primera de la noche a cargo de Jennifer Hudson junto al coro de niños de la escuela primaria de Sandy Hook que interpretaron America is beautiful en homenaje a las víctimas de la masacre.


Después le tocó el turno a Alicia Keys, que con un vestido rojo y a piano interpretó el himno nacional.

Si el año pasado Madonna deslumbró a los asistentes con una gran puesta en escena (eso si, abusando de playback), Beyoncé ha ofrecido un espectáculo diferente en el que se ha asemejado más a un concierto, cantando en directo y centrado en ella dejando de lado las grandes escenografías.