ESTRENO MUSICAL

Taylor Swift se vuelve invisible y se marca un Maddie Ziegler bailando en 'Delicate'

Taylor Swift ya tiene videoclip para Delicate, su nuevo single para dar impulso a su álbum Reputation. En él, la artista muestra el agobio que siente en su día a día para de repente, volverse invisible y "liberarse" bailando por los pasillos de un lujoso lugar lleno de gente de las altas esferas.

Taylor Swift bailando bajo la lluvia en el vídeo de 'Delicate'
Taylor Swift bailando bajo la lluvia en el vídeo de 'Delicate' // Youtube

Europa FM

Barcelona 12/03/2018 09:35

Taylor Swift quiere continuar quemando los últimos cartuchos de Reputation lanzando un llamativo vídeo para Delicate, su nuevo single. Como es habitual en todos los trabajos audiovisuales de la artista, Joseph Khan ha tomado el mando de esta nueva pieza en que empieza mostrando el día a día de la artista, siendo agobiada por los medios y gente que la reconoce a cada paso que da.

Aunque con un toque más humorístico, esta primera parte nos recuerda al icónico vídeo de Lucky, de Britney Spears, en el que narraba la falsa felicidad de la fama. Haciendo muecas frente al espejo para intentar sonreír sin ganas, de repente Taylor se vuelve invisible ante los ojos de las personas que la rodean en un lujoso hotel, ni siquiera su imagen tiene reflejo frente al espejo.

Lejos de provocarle angustia, la cantante disfruta de esta situación para liberarse y ponerse a bailar por las diferentes estancias y pasillos. Con extravagantes pasos de baile, Taylor nos recuerda bastante al vídeo que hizo Spike Jonze para una fragancia de Kenzo, en el que la actriz Margaret Qualley hacía una peculiar y llamativa coreografía abandonando una refinada fiesta.

Por otro lado, las expresiones faciales de Taylor Swift mientras baila, que van desde la felicidad hasta la desesperación, también nos recuerda al trabajo de Maddie Ziegler, la bailarina que protagoniza la mayoría de los videoclips de Sia.

Finalmente, Taylor recupera una misteriosa nota en la que le invitan a un bar, en el que entra y de repente recupera su identidad, ya que toda la gente que se encuentra en la barra se gira para mirarla.