EN EL ESTADIO OLÍMPICO

Barcelona se rinde a la inmortalidad de U2 y su ‘The Joshua Tree’

Han pasado 30 años desde que U2 publicase el disco que les convertiría en todo un fenómeno mundial. Corría el año 1987, y en aquella ocasión Barcelona se quedaba fuera de la gira The Joshua Tree. Ahora, el destino y 55.000 personas han querido rememorar uno de los momentos más exitosos de la carrera de la mítica banda irlandesa con un concierto único en el Estadio Olímpico, que durante más de dos horas ha repasado los grandes éxitos de U2 bajo la sombra de un inmenso ‘Joshua Tree’.

Concierto de U2 en Barcelona
Concierto de U2 en Barcelona // EFE

Europa FM

Barcelona 19/07/2017 10:48

A pesar de que The Joshua Tree nos ha dejado algunos de los himnos generacionales más potentes de nuestra época, que nos ayudaron a tomar decisiones importantes, nos hicieron dudar o nos llevaron tan lejos que ni las calles tenían nombre; el concierto de anoche arrancaba lleno reivindicación con un ‘Sunday Bloody Sunday’ que cerraba con Bono entonando “Moltes gràcies, Barcelona”. No, gracias a ti. Gracias por celebrar el 30 aniversario del icónico álbum con un concierto impresionante cargado con 22 temas llenos de nostalgia y reivindicación.

Bono en el concierto de U2 en Barcelona
Bono en el concierto de U2 en Barcelona // EFE

Después, todo el estadio vibró con ‘The new year’s day’, que mantiene su rock y su mensaje político intacto a pesar de los años. Bono tampoco perdió la oportunidad de recordar a otro grande del rock, David Bowie, y al introducir el tema 'Bad’, hizo referencia a la exposición dedicada al artista que hay actualmente en Barcelona, para posteriormente dedicarle el tema 'Heroes'.

Situados en medio del escenario sobre la pasarela, sin artificios, la música calaba hasta los huesos de los asistentes, y cuando comenzó a sonar ‘Pride (in the name of love)’ las gradas se convirtieron en un mar de luz irradiada por los móviles de los 55.000 asistentes que no dudaron en obedecer a Bono y alzar sus dispositivos iluminados, creando una atmósfera mágica que dio paso al rojo atardecer de la pantalla gigante, que dibujaba la silueta del árbol de Josué, con imágenes del fotógrafo holandés Anton Corbjin -que trabaja con la banda desde hace décadas, y es el artífice de la carátula del álbum que da nombre a la gira-.

Acompañados por la proyección de las potentes imágenes rodadas en el Death Valley y Zabriskie Point, y aderezados por el arte escénico de otro habitual del grupo, el diseñador Willie Williams, la banda tomó posiciones en el escenario central para comenzar su homenaje a ‘The Joshua Tree’ al son de medio millar de almas que vibraban bajo los acordes de ‘Where the Streets Have No Name’ y ‘I Still Haven't Found What I'm Looking For’.

Tras tocar 'Red Hill Mining Town', llegaba el turno de encarrilar la cara B del disco, no sin antes escuchar una reflexión del propio Bono sobre la inmortalidad de algunos de los temas compuestos por la banda bajo la atenta mirada del árbol de Josué: "Parece mentira que una canción pueda ser más relevante ahora que cuando se escribió 30 años atrás".

Como no podía ser de otro modo, el compromiso social también ha estado presente a través de las letras de las canciones, los mensajes en la pantalla y las palabras de Bono, pero sobre todo en el tema ‘Miss Syria’, antes conocida como ‘Miss Sarajevo’, acompañada de las imágenes del artista francés J.R del campo de refugiados Zaatari en Jordania, en el que viven cerca de 80.000 sirios.

Concierto de U2 en Barcelona
Concierto de U2 en Barcelona // EFE

Después, el ritmo regresaba con el rock de otros seis temas, varios del disco Achtung Baby, como ‘Ultra Violet (Light My Way)’, para cerrar con Bono hablando sobre la importancia y el poder de la gente que lucha por sus derechos, un discurso bañado por la melodía de ‘One’ y las luces de los móviles en la noche. Para acabar las dos horas de este concierto ‘inmortal’, la banda irlandesa tocón el tema de su próximo disco titulado ‘The Litle Thing Than Give You Away’.

Telonero de lujo

El público se daba más prisa que nunca para llegar al estadio porque allí esperaba nada menos que Noel Gallagher, para regalar algunos de los temas míticos de Oasis junto a los Noel Gallagher's High Flying Birds. Noel, ataviado con una camiseta del Barça, no dudó en recordar sus clásicos 'Wonderwall' o 'Don't look back in anger'.