MOMENTOS INOLVIDABLES

La reacción de una niña al abrir un regalo y encontrar a su padre tras meses separados conmueve a la red

Paloma, una niña sevillana que acaba de cumplir 8 años, llevaba meses sin ver a su padre, ya que se encuentra en Yibuti como parte de una misión de la Unión Europea. Cuando su padre le dijo que no podría estar en su cumpleaños Paloma se puso muy triste pero en realidad su padre quería darle una sorpresa que recordará siempre.

Reacción viral de una niña al ver a su padre tras meses alejados
Reacción viral de una niña al ver a su padre tras meses alejados // Faceboook Jesús Larios

Europa FM

Madrid 31/01/2017 11:56

Paloma es una niña, como cualquier otra, que el día 26 de enero celebraba su octavo cumpleaños. Un día antes, esta niña de Morón de la Frontera (Sevilla) habló por teléfono con su padre, Jesús Larios, que se encontraba a 5.600 kilómetros de distancia. "Le dije que no iba a poder ir, que a ver si me guardaba un trozo de tarta. Se puso muy triste", dice este militar del Ejército del Aire, que llevaba dos meses en Yibuti como parte de la misión de la Unión Europea contra la piratería en el Cuerno de África.

Pero esto no era cierto. Lo que en realidad tenía pensado el padre de la pequeña era hacerle un regalo muy especial: aparecer por sorpresa en su colegio. Una vez conseguido su objetivo, aparecer dentro de una caja por sorpresa, Jesús subió el vídeo a su cuenta de Facebook y, en pocas horas, ya alcanzaba más de cuatro millones de reproducciones.

La escena comienza con un beso entre Rosa, madre de la cumpleañera, y el regalo. "Entonces, entro a escondidas. Todos los niños estaban entretenidos en otra sala, de manera que yo podía acceder sin problemas. Me metí en una caja envuelta y entonces es cuando mi mujer le dice a Paloma y sus amigos que salgan", dice. La niña se emocionó al ver las dimensiones del regalo. Echó a correr, empezó a desenvolverlo y abrió la caja. Cuando vio a su padre, dio un grito, le abrazó y empezó a llorar. "Estaba que se me caían los palos del sombrajo", asegura Jesús, que metió a su hija en la caja y se pasaron varios segundos abrazados, mientras ella no paraba de llorar.