Lucia DeClerck es la anciana más mayor de su residencia de New Jersey. El mismo día que soplaba las velas de su 105 cumpleaños, la mujer dio positivo en coronavirus y tuvo que ser aislada, algo que le hizo echar de menos las charlas con sus cuidadores del Mystic Meadows Rehabilitation and Nursing.
Afortunadamente, Declerck tuvo síntomas leves y a los pocos días estaba de vuelta en su habitación. La anciana, que ha vivido la gripe española, dos guerras mundiales y la muerte de tres maridos, aseguró al New York Times que cuando supo que se había contagiado tuvo miedo.
La mujer contó al periódico que uno de los secretos para llegar a su edad había sido la oración, pero que no era el único. La anciana aseguró que no consume nada de "comida basura" y desveló una curiosa costumbre que, según ella, también le ha ayudado a ser tan longeva: comer pasas bañadas en ginebra.
"Llenas un frasco de ginebra e introduces las pasas y las dejas reposar durante nueve días. Después tienes que comer nueve al día", dijo sobre esta tradición, algo que su familia no creyó en un principio.
"Solo pensábamos: 'abuela, ¿qué estás haciendo? Estás loca'. Ahora nos reímos de nosotros. Ella ha vencido a todo lo que se le ha presentado. Ahora todos estamos comprando frascos y pasas amarillas para ponernos al día", dijo Shawn Laws O'Neil, su nieta de 53 años.
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