Lugares por el que pasa un gran número de personas diario como aeropuertos o estaciones de tren, han incrementado sus sistemas de seguridad durante los últimos años. Los detectores de metales y escáneres pueden detectar cualquier objeto peligroso e incluso los que no lo son, pero pueden ser sospechosos: Bolsos, mecheros, juguetes sexuales o paraguas podrían hacer saltar las alarmas de seguridad en estos sitios.