Lo último en Barcelona: semillas de verduras con forma genital para atraer a turistas
Que tu familia vuelva de su viaje a Barcelona y te traiga de recuerdo un pimiento fálico o una flor con forma de vulva, no tiene precio. Eso es lo que deben pensar tanto turistas como comerciantes de Las Ramblas. Las semillas eróticas se han convertido en un reclamo para el visitante.
Trabajar en el centro histórico de Barcelona tiene cosas buenas, y una de ellas es poder realizar estudios sociológicos con la gran manada de turistas que desfilan incansablemente Las Ramblas de día y de noche. Observas cómo son tentados por todo tipo de especímenes en su ruta por el paseo con mayor densidad de turismo: trileros, lateros que por arte de magia te sacan un pack de cervezas de la alcantarilla, vendedores de odiosos pitos para silbar canciones como un jilguero, top-manta que ha derivado en un mercadillo ambulante de productos falsificados... y de vez en cuando la persona que se te cruza pronuncia el nombre de alguna droga a ver si, por un día, se convierte en tu conseguidor.
En La Rambla hay de todo, y se puede encontrar de todo... tanto si es autóctono como si no es representativo de la ciudad. Por suerte, los viajeros más avispados ya han comprendido que los sombreros mexicanos no son propios de Barcelona. Y lo más natural es comprar algún objeto con el colorido mosaico de Gaudí, la camiseta del F.C. Barcelona, productos típicos envasados o alguna miniatura de las estatuas y monumentos de los que presume Barcelona. Pero con el nuevo invento de la agricultura moderna, el mundo entero nos conocerá por tener frutas y verduras con forma genital.
Es lo último para atraer al turista: pimientos con forma de pene (penis pepper), flores con forma de vulva (vulva flower) y puerros que parecen senos. Es la expansión de una moda que empezó hace dos años en la Costa Brava y son un reclamo de los puestos de La Rambla de toda la vida por subsistir ante las ordenanzas municipales; primero prohibieron los puestos de animales, después prohibieron vender recuerdos a los puestos de flores y, por último, el encarecimiento de los antiguos contratos de alquiler ha hecho desaparecer comercios emblemáticos.
Por 3 o 4 euros puedes llevarte a tu casa estas semillas eróticas y picantes, e incluso puedes customizarlas con las palabras 'Barcelona' o 'La Rambla' para que parezca más propio de la ciudad condal. No sabemos el volumen de negocio que ha producido esta curiosa fiebre por la horticultura genital, pero a muchos turistas les llama la atención y preguntan curiosos a los dependientes. "Las semillas eróticas son las más vendidas" asegura a La Vanguardia Jéssica Balastegui, que trabaja en uno de los puestos de flores del Ramblas. "La gente que viene aquí de despedida de soltero a menudo las compran porque son divertidas", dice Rosa, otra dependienta.
Pero no todo el mundo ha entendido esta curiosa oferta erótica de las Ramblas. Algunos puestos se han negado a venderla. "Un montón de escuelas y niños pasean por aquí", dice Carolina Palles a La Vanguardia. "Yo no creo que ésta sea la imagen que queremos proyectar a los turistas y locales".
¿Y a ti, qué te parece el penis pepper, la vulva flower o las melon tits?