EN 'EL HORMIGUERO'

Ainhoa Arteta se sincera sobre su experiencia al borde de la muerte: "Me salvé por los pelos"

La cantante Ainhoa Arteta ha reaparecido en el plató de televisión de El Hormiguero tras hacer frente a los graves problemas de salud que derivaron en la amputación de dos de sus dedos y que casi le cuestan la vida.

Ainhoa Arteta visita 'El Hormiguero'
Ainhoa Arteta visita 'El Hormiguero' | Antena 3

Europa FM

Madrid04/02/2022 13:47

El 2021 fue un año durísimo para Ainhoa Arteta debido a los graves problemas de salud que le han obligado a alejarse de los focos en los últimos meses. La cantante de lírica estuvo a punto de perder la vida hace unos meses tras sufrir una parada cardiaca derivada de una infección renal, que afortunadamente acabó tan solo con la amputación de varios dedos de la mano.

Ahora, ya recuperada de este difícil contratiempo, la soprano ha reaparecido en un plató de televisión para hablar con Pablo Motos en El Hormiguero sobre esta dura experiencia que tuvo que vivir y para compartir cómo vivió estos complicados momentos de incertidumbre y miedo.

Al borde de la muerte

"Estamos aquí para celebrar la vida porque casi te mueres", confesó el presentador de Antena 3 al dar la bienvenida al cantante. "Sí, casi me muero. Pero yo no me enteré, me enteré después", respondió la soprano, que aclaraba que sus complicaciones médicas no tuvieron "nada que ver con el COVID-19".

"Me dio una sepsis, un cólico nefrítico que se complicó, me indujeron al coma durante cuatro o cinco días y me salvé por los pelos. Soy alérgica a la penicilina y lo habían intentado con muchos antibióticos. Los cantantes y deportistas nos medicamos muchas veces con antibiótico y mi cuerpo había generado resistencia. Me moría y no había manera. Al final, sólo quedó la opción de probar con la penicilina, que si me daba una reacción alérgica muy fuerte me moría también, pero no quedaba otra", relató Arteta.

Perdió dos dedos

Estas problemas de salud le hicieron perder dos dedos durante el coma, algo sobre lo que ella misma ha hablado. "No me llegaba bien el riego a las extremidades, y tenía los pies y los dedos de la mano derecha negros. Perdí dos dedos y llevo el resto con injertos. Los de la izquierda se me salvaron porque están más cerca del corazón y ahí sí que llegaba la sangre", confesó la soprano.

La cantante también ha explicado que aún siente dolor en el dedo que perdió: "El famoso dolor neuropático es un dolor muy duro porque no se va con cualquier medicina y al principio sólo me calmaba la morfina. Tiene tanto que ver con el cerebro que el dolor se intensifica si por cualquier cosa no estás bien", explicó la última invitada del programa de Antena 3.

Además, Arteta también se sinceró sobre su decisión de no llevar prótesis: "Me da pereza. No me animé porque soy muy gesticulera y cuando canto también, así que me imaginaba que en algún concierto se me iba a escapar el dedo".

Durante el tiempo que permaneció en coma, Arteta ha revelado que, aunque no vio el famoso túnel del que las experiencias cercanas a la muerte hablan, sí tuvo un viaje: "Me vi en un espacio azul oscuro intenso y con estrellas. Yo me veía suspendida y había un silencio total. Vi pasar como una cosa roja por debajo con un ruido tremendo que debía ser el infierno".

Temió por su carrera

Su forma física no es lo único que se vio afectado tras los problemas de salud que vivió: llegó a temer por su carrera. De hecho, tras la intubación, la artista española ha contado que una de sus cuerdas vocales se vio afectada. "Se cerró una de las glándulas, se estaba formando un quiste de mucosa y no me podía medicar para bajar la inflamación. Para cuando pude, se me había formado ya un garbanzo", explicaba la cantante, que ahora se recupera de una operación.

Este mismo mes, la soprano volverá a subirse al escenario del Teatro Zarzuela: "Me asusté mucho cuando vi la posibilidad de que me podía quedar sin voz. Me operaron y el médico me dijo que me costaría reponerme de 6 meses a un año, pero aquí me ves, este mes ya doy un recital. A mí me gusta mucho cantar, creo que me sana, me cura y volver a poder sentir otra vez a esos autores que pasan por mi cuerpo a través de mis cuerdas vocales es de lo que más aprecio, además de estar viva".

Esta experiencia, sin embargo, le ha hecho ver la vida desde otra perspectiva y apreciar aún más el día a día. "La mente es muy poderosa y la puedes usar a tu favor o en tu contra, hay que tratar de tener menos cortisol y más vitamina", reflexionaba.

Asimismo, Arteta ha reconocido la labor de los sanitarios que, con su esfuerzo, consiguieron salvarle la vida: "Estuve diez días en la UCI de Covid, y es inconmensurable el valor de todos los sanitarios y médicos ante toda esta situación. La gente tiene que saber que cuando se moría alguien de coronavirus allí, se retiraban los sanitarios a un rincón tres minutos en silencio y después volvían las carreras para atender a los enfermos. Son los auténticos guerreros de este país. No puede ni debe haber recortes en Sanidad".