Primeras veces y una nana para Antonella: Antonio Orozco hace un recorrido musical en el Local de Ensayo Europa FM
Antonio Orozco ha sido pura emoción y diversión en el Local de Ensayo Europa FM. El artista se ha mimetizado rápidamente con los presentes y les ha entregado su corazón través de su voz, su talento musical e infinidad de divertidas anécdotas que han mostrado el gran sentido del humor y la inspiración del artista.

Si la euforia, la nostalgia, el talento y el sentido del humor se juntaran saldría como resultado el Local de Ensayo Europa FM de Antonio Orozco.
El artista ha protagonizado un emotivo y divertido viaje por toda su discografía y momentos inéditos que unos pocos privilegiados han podido disfrutar a tan solo unos metros del gran cantante y de sus músicos.
Y es que el clamor ha llegado nada más anunciar su nombre. "Me dijeron si me venía a hacer un ensayo y era justo lo que necesitaba, ensayar. Tengo que deciros a todos que hay canciones que no he cantado nunca", ha expresado, adelantando lo especial que iba a ser este pequeño concierto.
Y así lo ha sido: Local de Ensayo Europa FM se ha convertido en el primer ensayo del artista de la gira que está por llegar con el disco El tiempo no es oro. Así, ha sido "la primera vez" que ha cantado algunos temas en directo, por lo que ha necesitado algo de ayuda con las letras, demostrando su lado más modesto. Sin embargo, el público sí conoce las canciones nuevas al dedillo. "¿Han pasado cinco días desde que salió el disco y ya os los sabéis?", ha expresado el músico, sorprendido.

Han comenzado a sonar entonces los acordes de Te estaba esperando, creando ya un aura de magia con su voz rasgada tan característica. Y al terminar el tema, Orozco ha estallado en felicidad por esta nueva experiencia: "Estoy super emocionado, como cuando sales con alguien por primera vez. ¿Le gustaré o no le gustaré?".
Su experiencia durante el apagón
Una vez roto el hielo, el evento se ha vuelto un caldero de anécdotas y, como no podía ser de otra manera, Antonio Orozco ha vuelto a soltar una carcajada entre los presentes al hablar de dónde estaba cuando se cortó la electricidad en la Península Ibérica, no sin antes darlas gracias al único medio de información que funcionó durante el apagón: "Estoy seguro que todo el mundo está agradecido a una cosa en particular: la radio, una vez más, nos cambió la vida a todos y nos hizo vivir con menos angustia".
Cuando se fue la luz, "se asustó mucho", y ha desvelado con mucho humor lo que le ocurrió: "Me estaba haciendo una resonancia magnética y de repente la máquina dejó de hacer ruido. Yo estaba desnudo y al irse la luz la puerta no iba. Tuve que salir del tubo y pensé que si alguien hubiese entrado y encendía la luz... No pasó, pero yo desnudo gano mucho, tengo que decir".
El tiempo no es oro, el resultado de resurgir de las cenizas
Volviendo a la música, Orozco ha explicado que El tiempo no es oro "ha sido un camino largo, pero necesario". Con una sonrisa en la cara, el artista ha relatado su lucha personal: "Cuando tocas fondo lo único que te queda en la vida es ir para arriba. Hoy me alegro, pero cancelamos una gira entera con 111 funciones de teatro". "Quizás algunos llegasteis a ver el anuncio de La canción que nunca visteis... Acabo de caer, nunca mejor dicho", ha expresado entre risas sobre aquella gira que nunca se llegó a hacer y que, gracias a ese parón, se encuentra en el mejor momento de su vida.
"Algo pasó con 'Te juro que no hay un segundo que no piense en ti' que cambió mi vida"
Con casi dos Palau Sant Jordi agotados de su próxima gira y muchas más entradas vendidas, siente que "ha sido la magia de Te juro que no hay un segundo que no piense en ti" la que le ha llevado a este momento: "Algo pasó con esa canción que cambió mi vida".
Un recorrido musical por su carrera marcado por las primeras veces
Y entre tantas declaraciones tan sinceras, ha vuelto la música en directo con nada menos que un repaso por su trayectoria. Orozco ha viajado hasta el 2003, y han empezado a sonar las primeras notas de Devuélveme la vida, de la que ha entonado un fragmento. En ese momento ha confesado que le cambió totalmente la perspectiva de su éxito al escuchar esta canción en Operación Triunfo, donde se dio cuenta de que el tema le cambió la vida a más gente.
Y tras este hit ha llegado otro: Estoy hecho de pedacitos de ti, y entre su propia emoción y la del público ha recordado la vez que la que la cantó con Malú por primera vez. El relato ha saltado a improvisar con No hay más, momento que le ha hecho recordar otra bonita primera vez: "Fue en el Coliseum cuando canté por primera vez con Pablo López y algo cambió para siempre. Después fue pasando el tiempo y llegaron sorpresas como...".

Dejándose llevar entre la palabra hablada y cantada, Orozco ha empezado a entonar Mi héroe, canción que ha hecho llorar a varios espectadores de Local de Ensayo.
La historia de su vida ha continuado, esta vez aterrizando en 2021 para dar paso a Entre sombras y sombras me faltas. "Esta canción no tenía oportunidades, pero hasta ahora creo que es la canción más bonita que he escrito", ha expresado, envolviendo el entorno con su magia.
La nana tras Te juro que no hay un segundo que no piense en ti
"Os quiero contar el final de esta historia, que espero que sea el principio de otra historia", y en lugar de contarlo, ha cantado Te juro que no hay un segundo que no piense en ti con todo el público al unísono. "Qué emoción", ha expresado el artista, con los ojos brillantes.
De hecho, Orozco ha aprovechado este bonito instante para desvelar una exclusiva: que este single de El tiempo no es oronació de una nana que le canta a su hija Antonella. "A veces tiene cosas malas como que no quiere comer. Y yo para que comiera le cantaba una rueda de acordes: Antonella tiene los ojos redondos como una almendra y como un balón de Nivea".
"Antonella tiene los ojos redondos como una almendra y como un balón de Nivea"
Creando un momento de lo más cómico, todo el público ha cantado junto a él esta nana que posteriormente tomó forma en un éxito musical.
Además de demostrar la gran inspiración que suponen sus hijos en su música, Orozco ha encontrado el hueco para hablar de lo que significa para él que se dediquen o puedan dedicarse a la música: "Mi hijo Jan decidió con 12 años que quería ser músico y hace un tiempo que se fue a Inglaterra y está haciendo su camino. A mí no me preguntó qué me parece. Y mi hija tampoco me va a preguntar qué me parece y me parece genial, porque mis hijos nacieron con libertad".
Algunas anécdotas como artista
Como todo artista ha tenido traspiés en directo, y nunca mejor dicho, porque se ha lesionado el pie en un par de ocasiones en el escenario. Una vez en un concierto en San Juan en Puerto Rico, y la otra en Cambridge, donde quiso darle un giro a la situación: "Estaba yo subido a una silla cantando Devuélveme la vida mientras estaba vendándome el pie".
"He escuchado que los artistas tienen muchas probabilidades de volverse gilipollas, y eso es verdad, pero si esas cosas te pasan a una edad razonable es diferente. Este será mi mejor momento y se me nota muy orgulloso porque no me lo puedo creer", ha expresado el músico, con una alegría contagiosa.
Tras varias anécdotas de lo más enriquecedoras, el artista ha interpretado Lo inevitable, un tema inspirado en todas aquellas cosas que suceden con personas que tienen un pasado: "Esta canción lleva por título Lo inevitable, porque hay un montón de cosas en la vida que aunque no quieras están pasando". Así, ha entonado el nuevo tema, y el público ha vuelto a demostrar su fidelidad cantando al unísono el tema recién estrenado.

Y como el Local de Ensayo Europa FM está para improvisar, Orozco se ha arrancado a cantar un fragmento de 607591743, "la única canción en el mundo que lleva por título un número de teléfono". "Esta va ser la canción más impresionante de ver y de escuchar en lo que queda de vida de Antonio Orozco en los conciertos", ha adelantado el músico, en primicia.
El tiempo ha pasado volando, y en el tramo final el artista ha cantado de manera muy íntima Ya lo sabes, recordando aquella primera unión con Luis Fonsi. Y el broche final lo ha puesto cantando de nuevo Te juro que no hay un segundo que no piense en ti, pero introduciendo en el estribillo su ya épica nana a su hija Antonella, que ya se la sabía todo el público.
Y aprovechando esta acogida, el cantante ha dejado que el bonito encuentro musical terminara con sus fans cantándole a él, mientras él se daba un baño de masas ya bajo el escenario.