ENTREVISTA PARA 'ICON'

Miguel Herrán: "La gente piensa que mi vida es la p*lla, porque cree que me he f*llado a Ester Expósito y a Úrsula Corberó"

Miguel Herrán es uno de los actores del momento. Pero aunque parezca que todo en su vida debería ser perfecto, el actor ha desvelado el lado oscuro de la fama y algunos de sus demonios internos en una entrevista. El joven de 24 años asegura que "el dinero le ha ensuciado como persona" y lamenta que desde fuera su vida parezca perfecta: "La gente piensa que mi vida es la p*lla, porque cree que me he f*llado a Ester Expósito y a Úrsula Corberó"

Miguel Herrán es Río en 'La casa de papel'
Miguel Herrán es Río en 'La casa de papel' | antena3.com

Europa FM

Barcelona13/08/2020 11:14

Miguel Herrán es uno de los actores más cotizados de nuestro país gracias a las series La Casa de Papel y Élite, que lo ha consagrado como una de las estrellas del momento.

El éxito, la fama, el dinero y que todo el mundo quiera trabajar contigo o que prestes su imagen para sus firmas, parece la vida soñada. Pero nada más lejos de la realidad.

Así lo ha explicado el actor de 24 años en una entrevista para ICON de El País, en el que asegura que el dinero y la fama no le ha hecho más feliz, sino que le ha dado más preocupaciones.

"El dinero no me ha hecho feliz, me ha quitado bastante felicidad y me ha dado más preocupaciones que cuando no lo tenía. Me ha hecho más ambicioso. El dinero me ha ensuciado como persona. No lo valoro. En el resto sigo igual o peor", explica.

A raíz de estas nuevas preocupaciones, el año pasado Miguel publicó un vídeo en Instagram en el que aparecía llorando sin decir ni una sola palabra.

“Quería mostrar que cuando nadie me ve tengo mis problemas, he notado que la gente piensa que mi vida es la polla, que me he follado a Ester Expósito y a Úrsula Corberó, y que no me puedo quejar", confiesa.

UN PASADO COMPLICADO

Herrán asegura en la entrevista que le encantaría hacer una película sobre la vida de su madre, quién nunca tiró la toalla para sacarlo adelante a pesar de no haber sido un adolescente fácil: "Odiaba la vida, odiaba el mundo. Tuve una manera de ser bastante cabrona y de momento tengo miedo de contarlo, porque hice cosas de las que no me siento orgulloso".

Una personalidad autodestructiva que no solo sufría él, sino las personas que tenía alrededor: "Me levantaba, me miraba al espejo y no me gustaba ni cómo era, ni lo que hacía, ni cómo trataba a la gente, ni cómo me trataba a mí mismo".

Uno de los problemas con los que continúa lidiando en la actualidad es con la vigorexia que sufre desde adolescente: "Tengo espejos en los que me tengo prohibido mirarme con ciertas luces porque sé que me voy a obsesionar. Es una obsesión continua, porque una vez empiezas ya no paras".

Tras más de una década, Miguel confiesa que es la primera vez que se ha mirado al espejo y se ha aceptado tal como es y que no le ha preocupado la aprobación de los demás.

HASTA EL CIELO, SU NUEVA PELÍCULA

Afortunadamente, el joven encontró una motivación en la interpretación después de que Daniel Guzman se fijase en él para A Cambio de Nada, su debut en el cine con el que ganó un premio Goya.

Tras los éxitos de La Casa de Papel y Élite, Herrán se embarca en una nueva aventura en Hasta el Cielo, donde da vida a Ángel. Un joven de barrio que recurre al crimen organizado para llegar hasta lo más alto.