Samanta Villar nos ha contado cómo vive el confinamiento, y las acciones e iniciativas que está llevando a cabo, como la cadena de favores que arrancó en Instagram al inicio del confinamiento, primero para tratar de poner en contacto a la gente que necesitaba material de protección sanitario con aquellos que lo fabricaban o lo tenían disponible, aunque ahora asegura que han cambiado las prioridades, y lo que más se busca es asesoramiento legal o financiero, e incluso matrimonial: "Va a haber muchos divorcios a partir de ahora", comenta. Y añade, "es el momento de la reconstrucción, y se está notando".
Además, Samanta recuerda cómo conoció a Brian Cross, que fue grabando uno de sus programas de Conexión Samanta: Vida de DJ, en 2011, y cómo tras la emisión del mismo, Brian, al que antes se le conocía sobre todo en el mundillo de la música electrónica, pasó a ser un personaje reconocido por mucha gente en la calle, que había visto el programa en la televisión.
Han recordado anécdotas, como cuando se pasaron grabando 40 horas del tirón: "No teníamos dónde cargar las baterías de las cámaras".
SER MADRE CONFINADA
Hace un tiempo, unas declaraciones de Samanta sobre lo que supuso la maternidad para ella, dividieron a la opinión pública. La periodista afirmaba que se perdía "calidad de vida" al tener hijos, y ahora nos cuenta cómo está pasando estas semanas de confinamiento, sin que los niños hayan podido hasta ahora salir a la calle.
"Niños pequeños, problemas pequeños; niños grandes grandes problemas", comenta Samanta, que cree que en el futuro nos vamos a enfrentar a situaciones "para las que no estamos preparados", y pone como ejemplo la serie Years and Years, cuando la hija de una de las familias protagonistas, le dice a su madre que es "trans", y la madre, que estaba preocupada por cómo se comportaba su hija últimamente, respira aliviada y le dice que por supuesto, que no hay ningún problema y que tiene su apoyo.
Sin embargo, no se refería a transgénero, sino que quería ser trans-humana, un cíborg. Ahí estalla una ola de incomprensión por parte de sus, hasta ahora, comprensivos padres. Es un ejemplo radical, pero las sociedades se mueven a un ritmo vertiginoso y no siempre en la dirección que se espera.
CUÁL ES EL PERSONAJE MÁS CURIOSO
Recuerda con mucho cariño a un pandillero de las maras de El Salvador, que había dejado de estar en activo, un asesino que ha dio un giro de 180 grados, entrañable, que cuando lo conoció, se sorprendió a sí misma pensando en que le estaba "cayendo bien el asesino".
Samanta recuerda cómo es la vida para algunos niños en ese país, cómo las maras los acogen cuando son muy pequeños y no tienen dónde ir, y luego les obliga a matar. "Son situaciones muy impactantes que te hacen plantearte muchas cosas".
PRÓXIMOS PASOS
A Samanta, el confinamiento le pilló cuando acababa de grabar el último programa del formato en el que está trabajando para televisión, y ahora están centrados en el montaje, pero con muchas dudas sobre cómo y cuándo podrán volver al medio, o la propia renovación del proyecto. Samanta lo tiene claro: "Hay que salir a trabajar".
¿CÓMO SERÁN LOS PRÓXIMOS MESES?
Nadie tiene claro qué nos depararán los próximos meses o años, pero Samanta tiene claro que no será un tiempo fácil y que cosas tan cotidianas como ir a ver a los abuelos, probablemente no será posible hasta que encuentren una vacuna para el coronavirus. Aunque también habla de la "parte positiva", como la posibilidad de estar conectados a través de las tecnologías.
Sin embargo, recuerda que este año no habrá "grandes eventos" con mucha afluencia de gente, algo que el propio Brian Cross tiene muy presente y que sufre directamente, ya que es un habitual de algunos de los festivales de música electrónica más importantes del mundo, como Tomorrowland en Bélgica, o de nuestro país, como el Barcelona Beach Festival. Ahora, asegura Brian, toca crear música en casa a la espera de ver cuándo podrá volver a pinchar en evento multitudinarios.
EL CONSEJO DE SAMANTA VILLAR
"Hay que ser prácticos y no olvidarse de que esto es temporal, no hay que preocuparse. Si no pasamos todo el tiempo preocupándonos, se nos habrá pasado toda la cuarentena preocupándonos en lugar de aprovecharla para hacer lo que no podemos en la vida normal", y Samanta recuerda que no tienen que ser grandes cosas.
También recuerda que las cosas no van a ser fáciles para muchos cuando vuelva 'la normalidad': "Hay que exigir a las instituciones públicas que garanticen que nadie pase hambre", que la gente pueda tener su casa, su trabajo y pagar sus facturas. Aunque reconoce que "en el trabajo va a haber complicaciones", pero que "antes o después, vamos a salir de aquí".
También comenta que será muy importante a partir de ahora ser conscientes "de qué consumimos y a quién se lo compramos. Esto ahora va a ser crucial. Ahora vamos a decidir con nuestro dinero, qué negocios va a tirar adelante y cuáles no". No trata de marcar a qué negocio, grande o pequeño hay que apoyar, pero que seamos conscientes de que de esa inversión dependerá el futuro de mucha de la gente que conocemos.
¡Muchas gracias por pasar un rato en Europa Home Date, Samanta!