Shawn Mendes brilla en su paso por Madrid con viejos y nuevos éxitos
Shawn Mendes ha regresado a lo grande. El cantante ha brillado este martes en el Movistar Arena de Madrid, única parada en España de su tour On The Road Again, en la que lo ha dado todo y también han caído algunas lágrimas.
Este es el 'setlist' de Shawn Mendes en Madrid: lista de canciones de su gira ‘On The Road Again’

Más de tres años después de la interrupción repentina de su última gira Wonder: The World Tour, Shawn Mendes ha hecho un regreso triunfal a la música con la gira On The Road Again, un nombre que hace referencia al primer tour de su carrera.
Con este guiño no solo pretendía marcar el inicio de una nueva etapa, sino también el renacer de la carrera de un artista que tuvo que dejarlo todo para recuperar su salud mental. Su regreso, a su paso por Madrid, este martes en el Movistar Arena, no ha podido ser mejor: con un repaso por sus temas más míticos, pero también una reivindicación de los más nuevos.
De esta forma, Shawn ha arrancado por todo lo alto con uno de los mayores éxitos de su segundo disco Illuminate, There's Nothing Holdin’ Me Back, con el que ha demostrado que sigue teniendo la misma capacidad vocal que antes.
Nada más aparecer en el escenario, mientras sonaba la canción On The Road Again,ya podía notarse la energía que iba a derrochar durante toda la noche, algo que ha contagiado a su público al instante. Un estadio lleno de vítores y aplausos ha recibido al cantante dándole la bienvenida que se merece a la capital.
Entregado con España
Desde luego, el público estuvo entregado al espectáculo, especialmente cada vez que Shawn se ponía a hablar, como hizo antes de empezar el show. “¡Hola, Madrid! ¿Cómo estás?”, fue la bienvenida que hizo el cantante, una de las muchas intervenciones, entre las cuales algunas veces se atrevió con el español.
Con el escenario completamente a oscuras, los primeros acordes de Wonder empezaron a sonar, dejando paso a una iluminación roja y blanca. En un espectáculo de luces sorprenderte, Shawn lo dio todo, finalizando con un “Muchas gracias, España”, que hizo enloquecer aún más a los fans.
Llegó el turno de Treat you Better y por poco se cae todo el estadio. Fue tal efusividad con la que el público empezó a cantar, que hasta Shawn se detuvo para reírse antes de continuar. Incluso llegó a girar el micro para dejarlos cantar, quizás su forma de preparase para las desgarradoras notas que iba a alcanzar en los estribillos finales de la canción.
Llegó el turno de 'Treat you Better' y fue tal efusividad con la que el público empezó a cantar que Shawn tuvo que parar para reír antes de seguir
Únicamente un foco iluminaba a Shawn y el cantante aprovechaba el pequeño descanso para avisar de que intentaría hablar en español de vez en cuando, aunque se le veía algo nervioso porque no sabe muchas palabras. “Estoy muy feliz de estar aquí”, declaraba antes de confesar que este está siendo el “público más ruidoso” de toda la gira.
Monster, su éxito junto a Justin Bieber y recogido en su disco Wonder de 2020, fue el siguiente en interpretar, saltando chispas en el escenario y concluyendo con un dueto de guitarras por parte de Shawn y uno de sus músicos.
Entonces, con unas notas de piano y un pulso de círculos morados, Shawn dio paso a Teach Me How to Love, justo después de decir un “Madrid, te amo mucho”. Poco a poco, las luces empezaron a combinarse con tonos morados durante la transición a Lost in Japan, volviendo a vibrar el público con una de sus canciones más conocidas de su disco Shawn Mendes de 2018.
Imágenes rurales, tocando la guitarra, escenas con amigos, abrazos, lloros… En definitiva, Shawn compartió en pantalla lo que fue parte de la grabación de su nuevo disco Shawn, un proceso de sanación y de encontrarse a sí mismo. Con ello, pedía el aplauso a su banda, quienes bajaron al medio del escenario para cantar con él los temas Isn’t That Enough y Heart of Gold.
En ambos temas, el público respondió con las luces de sus teléfonos moviéndose a un lado y a otro, sobre todo durante Heart of Gold. Esta es una de sus canciones favoritas, pues habla del fallecimiento de uno de sus mejores amigos. “Si has perdido a alguien recientemente, aprovecha estos tres minutos para celebrar su vida”, declaró Shawn ante un público que lo escuchaba emocionado.
Un alarde de energía y amor hacia su público
Si por algo se le puede felicitar en esta noche a Shawn es porque no falló ni una sola nota, haciendo apenas descansos, ni siquiera para dejar que el público cantara. Pero durante Señorita, el tema que tiene con su exnovia Camila Cabello, podría no haber cantado un solo segundo y el público lo hubiese hecho por él. En este punto, podía verse al cantante más cansado, pero aún así, la energía de sus fans le dio el impulso que necesitaba para seguir adelante como si nada.
Con la cara y el pelo empapado en sudor, Shawn lo dio todo con Ruin, uno de sus primeros temas y con el que público se acercó corriendo a las vallas del escenario. Quizás lo hicieron porque sabían el siguiente paso del cantante hacia el final de la canción, cuando saltó del escenario para acercarse a sus seguidores. Abrazos, besos y regalos fueron la forma de demostrar la devoción hacia el artista. Una devoción que se llevó consigo al escenario, concretamente un gorro de vaquero y una bandera de España.
Así, al más puro estilo cowboy, con su nuevo gorro y una bandera de España colgando de la cadera, se subió al escenario. Pero todos estos elementos que agarró con visible ilusión le costaron algún percance: primero porque se tropezó con un foco al ir a colgar la bandera en el piano y luego porque el gorro le hizo sudar aún más mientras cantaba Never Be Alone y tuvo que lanzarlo de vuelta al público.
Este tema, uno de los más emocionales para muchos de sus fans, estuvo acompañado por imágenes de bruma que después fueron sustituidas por imágenes del canadiense en giras previas. En este momento, Shawn dedicaba unas palabras al final de la canción, dando las gracias a todos por haber estado con él desde su primera visita a España en 2015 hasta la última en 2019.
En esta línea tan emotiva, Shawn empezaba su tema Youth con un discurso esperanzador para las generaciones más jóvenes que, para él, son el futuro. En un contexto actual tan conflictivo, son los únicos que pueden “cambiar el mundo”, gracias a la “sabiduría” de nuestros antepasados y a la sensibilidad y el sentimiento de inclusión.
Con este mensaje esperanzador y un “sentimiento abrumador de amor”, Shawn cantaba al final de la plataforma, iluminado por varios focos. Para acabar la canción, el cantante retó al público a aplaudir muy rápido al ritmo que él tocaba la guitarra, animando a aumentar cada vez más el ritmo hasta llegar a una velocidad impresionante con el instrumento.
En este contraste continuo entre emotividad y efusividad, se abrió paso uno de los mayores éxitos de su carrera, Stitches, una interpretación que hizo él solo con la guitarra y en la que el púbico mostró una entrega total en los estribillos. Pero después vino It’ll Be Okay, un tema que habla sobre dejar ir a alguien aunque lo ames y que muchos fans piensan que se lo dedicó al componerlo a Camila Cabello.
Si hubo momentos de locura en la noche fue cuanto tocó el turno de 'If I Can’t Have You' y 'Why Why Why'
Si hubo momentos de locura en la noche, dos de los mejores fueron durante If I Can’t Have You y Why Why Why. Esta última canción fue la que marcó el regreso de Shawn a la música tras su retiro por problemas de salud mental, siendo de las canciones en las que más se dejó la voz el artista en el Movistar Arena, e incluso lanzó un beso al público por la emoción con la que lo acompañaron.
Para el último tema, Shawn dejó la guitarra a un lado y se sentó al piano, regalándonos una interpretación magistral de In My Blood. La letra habla sobre querer rendirse, dejarlo todo y desistir a luchar contra las emociones negativas, pero Shawn no puede dejar de luchar, no está en su sangre ser así. Y menos mal que no lo hizo, pues de lo contrario no nos hubiera dado este show que muchos no olvidarán.
De nuevo con la guitarra, Shawn subía junto al batería para acompañarle mientras tocaba el final de la canción, saltando de pronto desde allí. Entonces, un estallido de confetis blancos aparecía y volvía a bajar con el público, despidiéndose de nuevo con gestos de amor. Esta vez subió solo con una bandera de España, extendiéndola y abrazándola mientras hacía gestos de agradecimiento y se mostraba sumamente feliz. Poco después, el canadiense abandonaba el escenario con su banda, dejando tras de sí un estadio que no dejaba de aplaudirle y que aún sigue con los pelos de punta.
El regreso de una gran estrella
Sin lugar a duda, Shawn Mendes ha hecho su regreso a los escenarios de la mejor forma posible, recordando que aún sigue viva su esencia, pero también demostrando que tiene un mundo interior precioso que está dispuesto a compartir con el mundo.
La superación de su depresión y el viaje de autodescubrimiento que ha realizado estos últimos años le han dado la fuerza necesaria para darlo todo en un show con el que ha demostrado que la música no solo puede cambiar el mundo, sino también hacer latir corazones y conectarnos los unos con los otros.