La cantante dio un gran susto a sus fans y es que era la encargada de la actuación más importante de los premios, la de clausura. El accidente tuvo lugar durante la canción Living for Love y tras estar subida en unas escaleras en compañía de un grupo de bailarines cayó de espaldas varios escalones.
A pesar de esto, Madonna demostró ser toda una profesional y se volvió a subir al escenario para continuar con la actuación como si nada hubiera pasado.
Al acabar el concierto la cantante quiso tranquilizar a sus seguidores y colgó un mensaje en su cuenta de Instagram : "¡Mi bella capa estaba atada demasiado fuerte! Pero nada puede detenerme y el amor realmente me levantó! Gracias por sus buenos deseos. ¡Estoy bien!".