CONCLUSIONES MÉDICAS

Todo lo que se sabe sobre los trombos en mujeres asociados a las vacunas de Janssen y AstraZeneca

Algunas (muy pocas) personas, sobre todo mujeres, han presentado trombos tras ponerse las vacunas de AstraZeneca y Janssen contra el coronavirus. ¿A qué se debe este problema? Resolvemos esta y otras dudas intrínsecas al sexo.

Identifican las causas de los trombos asociados a los vacunados con AstraZeneca
Identifican las causas de los trombos asociados a los vacunados con AstraZeneca | Pexels.

Manuela Sanoja

Madrid16/04/2021 13:30

El último fin de semana de diciembre de 2020, antes de haberse cumplido el año desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) decretara la COVID-19 como una pandemia mundial, se inició la estrategia de vacunación en España. La primera de las vacunas aprobadas por la Unión Europea (UE) fue la de Pfizer (21 de diciembre), aunque no tardaron en llegar otras dos, las de Moderna (6 de enero) y la de AstraZeneca (29 de enero). Pero ante lo que parecía que iba a ser un auténtico respiro a la crisis sanitaria y una pronta vuelta a la normalidad (la de antes, no la nueva), no tardó en dar un giro de 180º.

Primero llegaron los problemas burocráticos: AstraZeneca envió menos diales de los pactados a los países miembros de la UE. Después, a mediados de marzo, los sanitarios: después de que se dieran algunos casos de trombos en personas vacunadas, la Agencia Europea del Medicamento (EMA) decidió investigar la vacuna. Tras una primera valoración positiva, los gobiernos que habían paralizado su puesta la retomaron. Pero el tema no quedó ahí. Pasadas un par de semanas, los casos de personas con efectos secundarios graves seguían apareciendo y copando las primeras planas de los diarios. De nuevo, la EMA y las autoridades de los países tomaron cartas en el asunto.

El veredicto final de la agencia (al menos, por ahora) es que los beneficios siguen superando a los riesgos. El gobierno español, por su parte, decidió desviarla a personas en la franja de edad entre los 60 y 69 años, porque la mayor parte de casos se presentan en mujeres menores de esta edad una vez pasadas dos semanas de la inyección. Y aquí, llegamos a lo que nos atañe, ¿a qué se debe que los efectos secundarios sean más frecuentes en un género que en el otro? Manuela Baleares, vicepresidenta del Consejo General de Colegios de Médicos (CGCOM), y José Luis Barranco Quintana, miembro del Grupo de Trabajo de vacunas de la Sociedad Española de Medicina Preventiva (SEMPSPH), responden a esta y otras dudas sobre las mujeres y las vacunas de la covid 19.

Los efectos secundarios graves son una minoría

Sobre la seguridad de las vacunas, Baleares asegura que todas aquellas que pasan los controles éticos y de calidad de las agencias reguladoras “son seguras tanto en hombres como en mujeres”. De hecho, previo a pasar dichas inspecciones han tenido un período de estudio en el que han participado tanto hombres como mujeres de manera promocional. “No sería ni ético ni admisible la realización de un ensayo clínico previo a la comercialización de una vacuna en la que la distribución de los grupos de estudio no fuese equiparable”, sentencia la médica, y añade que “el hecho de que se hayan localizado adversos con predominio en mujeres no significa que en ellas no sean seguras, sino que debemos estudiar por qué se produce”.

"Que se hayan localizado adversos con predominio en mujeres no significa que en ellas no sean seguras"

Aunque no se sepa el motivo por el cual esta complicación se da más en mujeres que en hombres y haya que investigarlo, la ciencia tiene ya algunas hipótesis. “Las reacciones adversas son más frecuentes en las mujeres, pero actualmente desconocemos el motivo exacto que lo provoca, la explicación más plausible es que su sistema inmunitario responda mejor y de manera más potente. Esto es un arma de doble filo: tienen una mejor respuesta a las vacunas, pero también despiertan una mayor proporción de efectos adversos” ,continúa la experta.

La alarma que se ha generado con la vacuna de AstraZeneca parece estar repitiéndose con la recientemente aprobada Janssen, y esto tiene una explicación. “Estos trombos se están diagnosticando en las vacunas vectoriales (AstraZeneca y Janssen), hecho que es lógico, ya que comparten mecanismo de acción”, explica el especialista. Sin embargo, cabe recalcar que esta reacción se ha dado también en las otras. “Puede ocurrir con todas”, dice la médica. Pero lo que es aún más importante es que es sumamente infrecuente: sucede en apenas uno.

Tanto es así que, como ya señalamos, autoridades sanitarias como la EMA y la OMS no desaconsejan su administración. Al contrario, reiteran que sus beneficios son mayores que sus efectos adversos. Y aquí surge otra duda: si las autoridades permitieran que los menores de 60 se la pusieran bajo su propio riesgo, ¿sería recomendable que una mujer en estas edades lo hiciera? “Sería recomendable que cualquier ciudadano se la administrase, ya que los beneficios superan en mucho a los riesgos. En aquellos ciudadanos que se la administren deberán realizar una vigilancia activa de síntomas compatibles: dolor brusco e intenso de cabeza, pérdida de visión, dolor torácico, abdominal, disnea, flebitis en las dos semanas posteriores y acudir a su médico para que diagnostique el motivo y si está relacionado o no con la vacunación”, indica Baleares.

"Hay que llevar a cabo una vigilancia activa de síntomas compatibles y acudir a su médico"

Embarazo, lactancia y otras vivencias de las mujeres

Más allá del asunto de los trombos, pueden surgir otro tipo de dudas que atañen únicamente a la mujer como pueden ser la relación de las vacunas con el embarazo, con la toma de anticonceptivos o con determinadas etapas de biológicas como la menopausia. Las resuelve el experto.

¿Existen riesgos para las mujeres que quieren quedarse embarazadas al ponerse alguna de las vacunas? “No se han identificado riesgos o patologías en aquellas mujeres que se quedan embarazadas tras vacunarse. Las recomendaciones actuales son esperar al menos 2 semanas desde la finalización de la vacunación para poder quedarse embarazada”, dice el especialista.

¿Y para las que ya están embarazadas? “Las vacunas frente al COVID-19 son vacunas de microorganismos inactivados o muertos, por lo que como en el resto de vacunas de este tipo no deben producir ningún efecto adverso, de hecho se vacuna a las embarazadas de manera rutinaria con vacunas de microorganismos muertos: como es frente a la gripe y la tosferina. Lo que no se recomienda actualmente es vacunar durante el embarazo hasta que no dispongamos de más estudios. Aunque, en casos individualizados en los que el riesgo de la embarazada sea grave de padecer COVID-19, se puede valorar vacunarlas”, aclara el médico.

Aquellas que ya han dado a luz y se encuentran en periodo de lactancia no tienen de que preocuparse: “Se pueden administrar todas las vacunas sin problemas ni para ella ni para su bebé”. Tampoco tienen más riesgo las que toman anticonceptivos ni las que están en edad de la menopausia. De hecho, “las únicas contraindicaciones actuales para que un ciudadano, hombre o mujer, se vacune es que haya tenido una reacción adversa grave postvacunal a una dosis previa de cualquiera de las vacunas, que padezca efectos trombóticos producidos por la heparina. Una contraindicación temporal es que en el momento de la vacunación padezca una enfermedad aguda, en cuyo caso habrá que postponerla”, añade.

"Las únicas contraindicaciones actuales para que un ciudadano se vacune es que haya tenido una reacción adversa grave postvacunal a una dosis previa de cualquiera de las vacunas o que padezca efectos trombóticos producidos por la heparina"

El riesgo de padecer coronavirus, de poder trasmitirlo a otras personas, y de que sea grave “siempre es mayor que los efectos adversos que puede producir la vacuna”, sentencia el experto. Ambos recalcan que las vacunas aprobadas son seguras y “el único motivo por el que una mujer [o cualquier otro ciudadano] pueda temer más a la vacuna que al propio virus es la desinformación. Las vacunas son tremendamente efectivas y salvan vidas, y en esta enfermedad en concreto los beneficios de la vacunación son muy superiores a los riesgos de padecer rarísimos efectos adversos más allá del dolor en el punto de inoculación, fiebre y el malestar general”.