Jeremy Allen White se convierte en Bruce Springsteen en su biopic: "Desde el principio él fue muy acogedor"
Cuerpos especiales se traslada para charlar con Jeremy Allen White, el actor que da vida al gran artista en Springsteen: Deliver Me From Nowhere. Y este proyecto unió para siempre al intérprete y al cantante, tal y como le detalla a Eva Soriano y Nacho García.

Después de obtener el permiso de Mickey Mouse, Eva Soriano y Nacho García tuvieron la gran oportunidad de entrevistar al actor internacional Jeremy Allen White, que protagoniza el biopic Springsteen: Deliver Me From Nowhere.
El intérprete se ha volcado con Cuerpos especiales al contar los detalles de cómo ha vivido esta experiencia tan gratificante, que se verá en Disney+ a partir del 24 de octubre. "Pasé mucho tiempo con Springsteen en el rodaje y tenía muchas dudas sobre retratar su historia de manera fiel", ha insistido el estadounidense, que remarca el vínculo con el artista.
De hecho, sobre si tiene confianza con el intérprete de Born in the USA, el cantante se lo toma con humor: "No sé si me invitaría a la cena de Navidad, pero he pasado mucho tiempo en su casa". "Desde el principio él fue muy acogedor", ha señalado el actor.
"No sé si Springsteen me invitaría a la cena de Navidad, pero he pasado mucho tiempo en su casa"
A Allen White costó mucho retratar a Bruce Springsteen correctamente, y ahora siente "alivio" con el resultado, y también con el hecho de solo haberse centrado solo en un periodo de la vida del músico.
El primer día entre Allen White y Bruce Springteen
El primer día que Jeremy Allen White conoció al artista ya forma parte su historia personal. "Tuve la suerte de estar con un grupo de gente interesante, con Emma Thomson y Pierce Brosnan […] Fue interesante ver a estos artistas consolidados ponerse nerviosos con Bruce, eso me hacía sentirme seguro de mí mismo", ha explicado en el anti-morning show. Eso sí, la actitud del artista en todo momento le hizo sentirse muy "acogido".
Jeremy Allen White se encontró por primera vez con Springsteen en el estadio de Wembley de Londres, antes de que diera un concierto ante 90.000 personas. Y su encuentro fue en mitad del recinto, cuando todavía estaba vacío: "Él era el jefe y estaba en su salsa, y yo solo era un visitante ahí".
El actor admite que se hizo "el guay" y que incluso Bruce Springsteen le miró "directamente al os ojos" en mistad del show. Siente que fue para "transmitirle esa energía" de los conciertos y de la conexión con el público. Y esa mirada le puso tan nervioso que le costó dormir esa mañana.
Más allá de su próximo proyecto cinematográfico, el actor ha reivindicado su plato español favorito, que él mismo lo ha cocinado: la tortilla de patatas, pero ha dejado claro que con cebolla.