TUTELADA HASTA EL AÑO PASADO

Amanda Bynes, ingresada en un psiquiátrico tras pasear desnuda por Los Ángeles: su infierno con las drogas y los problemas de salud mental

La actriz, que alcanzó una grandísima popularidad en los años 90 por protagonizar comedias románticas como Un Sueño para Ella, ha sido ingresada en un centro psiquiátrico tras ser encontrada vagando desnuda por las calles de Los Ángeles. La propia Amanda Bynes fue la que pidió ayuda a la policía.

Amanda Bynes
Amanda Bynes | Getty

Europa FM

Madrid22/03/2023 13:28

No es ningún secreto que Amanda Bynes lleva años lidiando con problemas de adicciones y salud mental. Aunque protagonizó muchas de las grandes comedias de finales de los 90 y principios de los 2000, como Hairspray (2007) o Un Sueño para Ella (2003), hace años que se retiró de la interpretación.

Zac Efron y Amanda Bynes
Zac Efron y Amanda Bynes

El pasado mes de marzo la actriz recuperaba su libertad después de estar nueve años bajo una tutela- a la que se sometió de manera voluntaria- que controlaba su madre, un caso con similitudes al de Britney Spears.

Sin embargo, parece que Bynes no ha sido capaz de recuperar el control de sus actos. Por lo menos así lo publica la revista TMZ, que asegura que la joven permanece ingresada en un centro psiquiátrico tras ser encontrada vagando desnuda por las calles de Los Ángeles.

Según un testigo presencial, fue la propia actriz -que sufre un trastorno bipolar- la que paró a la Policía para pedir ayuda y asegurar que estaba saliendo de "un episodio psiquiátrico". Tras esto, fue llevada a comisaría y posteriormente a un centro especializado para tratar sus problemas de salud mental durante al menos 72 horas. Una vez transcurrido este tiempo, se busca un tratamiento y entorno adecuado a sus necesidades.

Este pasado fin de semana se esperaba la participación de la actriz en un convención de fans nostálgicos de los 90. Allí iba a participar en el panel All That pero canceló poco antes alegando que no se encontraba bien. Su expareja aseguró a las autoridades que recientemente había dejado de tomar la medicación.

Adicciones, psicosis y problemas con la ley

La actriz reconoció que consumía drogas y que su salud mental era frágil, lo que hizo que su fulgurante carrera comenzase a perder mecha.

Su papel en la película Rumores y Mentiras (2010) fue el inicio del fin. En 2014 anunció en Twitter que se retiraba para siempre de la interpretación.

"No podía aguantar mi aspecto en la película y no me gustó mi actuación. Estaba totalmente convencida de que necesitaba terminar mi carrera después de verla. Estaba hasta arriba de marihuana cuando la vi, pero por alguna razón, comenzó a afectarme. No sé si fue una psicosis inducida por las drogas o que, pero afectó a mi cerebro de una manera totalmente diferente a otra gente. Cambió por completo mi manera de ver las cosas", contó en el año 2018 a la revista Paper, a la que también confesó que consumía marihuana desde los 16 años, éxtasis y Adderall.

La primera vez que detuvieron a Bynes fue en el año 2012 por conducir bajo los efectos del alcohol. Durante los siguientes cinco meses la detuvieron tres veces más; dos de ellas por el mismo motivo y otra por conducir sin carnet.

Fue entonces cuando se quedó sola ante el peligro: su agente, publicista y abogado la abandonaron a su suerte y ella tomó la decisión de marcharse a Nueva York y dejar Hollywood para siempre.

Recaídas, problemas de salud mental y una tutela a lo Britney Spears

Su estancia en la ciudad que nunca duerme no fue precisamente un camino de rosas. Volvió a tener encontronazos con la ley por abuso de drogas, y fue internada en un centro de rehabilitación durante seis meses en 2013 —y posteriormente en 2014 y 2019—.

Después de eso, su salud mental empeoró considerablemente y afirmó que su padre abusaba de ella, declaraciones que su familia negó rotundamente.

"Mi padre abusaba de mí física y verbalmente. Me llamaba 'fea' y me decía que si quería tener sexo con él. Si decía que no, me obligaban a vivir con él", espetó. Horas después se retractó de su acusación asegurando que tenía un microchip en el cerebro que le había hecho decir eso.

Ese mismo año, y tras agravarse su salud mental, Bynes se sometio voluntariamente a una tutela por parte de su madre, Lynn Bynes, para controlar sus bienes.

No fue hasta principios de 2022 —9 años después— cuando a exactriz quiso recuperar el control de su vida. Para ello tuvo que presentar los documentos pertinentes y, en marzo de ese mismo año volvió a ser libre.