La reacción de Jada Pinkett al enterarse de que Willow Smith es poliamorosa

Willow Smith, la hija pequeña de Will Smith y Jada Pinkett, ha sorprendido a su familia con sus últimas declaraciones respecto a su vida amorosa. La joven de 20 años se ha definido poliamorosa y lo ha hecho reivindicando este estilo de vida que concibe tener varias parejas sentimentales al mismo tiempo.

Su decisión la ha expresado en el espacio televisivo que comparte junto con su abuela materna Adrienne y su madre enFacebook llamado Red Table Talk. En él discuten aspectos generales de la vida teniendo presente la opinión de tres generaciones.

"Soy una persona poliamorosa", ha confesado para sorpresa de su madre que le ha preguntado directamente cómo había llegado a la conclusión de sentirse como tal.

"Con el poliamor, siento que la base principal es la libertad de poder crear un estilo de relación que funcione para ti y no solo entrar en monogamia porque eso es lo que todos los que te rodean dicen que es lo correcto", ha comenzado diciendo.

"Pensé: ¿Cómo puedo estructurar la forma en que abordo las relaciones con eso en mente?" ha seguido, afirmando que encontró su respuesta "al investigar sobre el poliamor, las razones por las que existen las relaciones monógamas, el porqué del matrimonio, por qué ocurren los divorcios y qué es la infidelidad".

Concibe el amor como algo sentimental

Además, ha asegurado que el poliamor lo concibe como algo sentimental y no sexual. "No se trata de sexo sino de libertad. En mi grupo de amigos, soy la única persona poliamorosa y tengo menos sexo que mis amigos", confesó.

Unas razones que hicieron que su madre Jada Pinkett confirmara que se encontraba totalmente a favor de la decisión de su hija siempre que sus parejas estén de acuerdo con la situación.

"Es querer configurar tu vida de manera que puedas tener todo lo que quieres. Creo que todo vale siempre que las intenciones sean claras. Sé que hay mucha belleza fuera de las cosas convencionales", dijo.

Un pensamiento que no consiguió convencer a su abuela que –a pesar de apoyar a su nieta– salió en defensa de los matrimonios tradicionales alegando que ella pensaba así dado "que es algo que la habían enseñado en el momento de casarse, en un ambiente religioso y acompañada del pastor que la caso".

Sin embargo, sí que también confesó que mantener una relación fue un pensamiento que se le pasó por la cabeza varios años después de casarse, aunque para ella el hecho de tener una nueva relación o una ajena a su marido lo habría considerado como "infidelidad".